sábado, 12 de diciembre de 2009
Heráldica
Teniendo en cuenta la intención de abrir una nueva sección en el blog que tratará sobre los diferentes blasones repartidos por Galicia, creemos conveniente dedicar una breve entrada para la definición de conceptos.
La heráldica se desarrolló durante la Edad Media en toda Europa hasta convertirse en un código coherente de identificación de personas, el blasón los representaba y diferenciaba del resto de la sociedad existente.
El blasón o escudo de armas está compuesto por el campo (superficie interior del escudo) y éste a su vez puede estar partido en diferentes cuadrantes. Jefe define la parte superior central, mientras que la inferior sería la punta. La diestra define la parte derecha del escudo (la izquierda del observador) y siniestra la parte izquierda. El centro se define a sí mismo.
Para finalizar esta pequeña introducción, una muestra de los esmaltes utilizados en la confección de la Heráldica, resaltando su regla principal: "Ni metal sobre metal, ni color sobre color"
Estos ejemplos representarían los metales: el oro y la plata.
Mientras que aquí vemos los colores (a la izquierda en color y a la derecha su correspondencia en blanco y negro), anaranjado, púrpura, azur (azul), sinople (verde), sable (negro) y gules (rojo).
Escudo del ayuntamiento de Boiro
Desarrollada durante el medievo, la heráldica difundió por toda Europa un código coherente de identificación de personas. La nobleza y la Iglesia Católica la utilizaron para sus diferentes linajes o jerarquías, al igual que otros colectivos humanos como gremios y asociaciones, e incluso para la identificación de villas, ciudades y territorios.
Y por una villa comenzaremos este nuevo recurso de nuestro blog, más concretamente por la villa coruñesa de Boiro.
El escudo de armas que la diferencia de otras poblaciones se escogió en el año 1983 por la corporación municipal existente, y sus armas son:
campo de azur, con la Cruz de Santiago de gules franqueada por dos torres de oro, sobre ondas de plata y azur, y en jefe una palma de plata. De timbre la Corona Real.
La Cruz de Santiago representa la diócesis a la que pertenece Boiro y la palma de plata a Santa Eulalia mártir, patrona de la feligresía local. Las torres representan la defensa y custodia del territorio, mientras que las ondas del mar a nuestra querida Ría de Arousa. El timbre, por supuesto, la Corona Real de España.
viernes, 11 de diciembre de 2009
Os namorados do Castelo da Lúa
Es nuestra tierra rica en leyendas y romances, y el Castelo da Lúa no escapa a los seductores encantos del misterio de los tiempos.
Se dice que tras una batalla de intereses feudales, siendo la fortaleza bastión templario, un joven malherido fue apresado junto con su amada, cuyos desvelos y cuidados fueron suficientes para que éste escapara de la llamada de la muerte. El amor recíproco de ambos jóvenes los mantenía vivos en las mazmorras templarias.
Fue un joven templario el que, conmovido por el infortunio de los jóvenes, les devolvió la libertad una noche sin luna, poniendo a escondidas una pequeña embarcación que los ayudaría a marchar lejos de sus carceleros.
Los enamorados guiaron la pequeña barca rumbo a la libertad, sin embargo la luna, hasta ahora ahogada en las sombras, apareció en la noche recortando la silueta de la frágil barca contra el horizonte, haciéndolos visibles ante sus enemigos.
Los vigías alertaron de la evasión de los presos, a los que la guarnición de ballesteros respondieron con una lluvia de flechas. El joven templario conmovido intentó ayudarlos, más las flechas asesinas no hacían distinción a la hora de dar muerte.
Desaparecida toda esperanza de lucha, el joven se inclinó sobre su amada, tratando de evitar de esta manera que las flechas diesen con ella, mas no pudo evitar que diesen con él. La joven, viendo a su amor inerte cayendo al mar, tras un grito de amor y maldición se echó tras él.
Al día siguiente, el mar caprichoso abandonó los cuerpos enamorados sobre la playa, unidos por un abrazo eterno que los uniría por siempre.
El jefe templario los enterró al pié de una de las torres interiores del castillo, y decía la leyenda que, desde entonces, todas las noches de luna un rayo de luz se posaba sobre la sepultura de los jóvenes, velando su amor incondicional, y que al anunciarse el alba, brillaban con siniestro fulgor encarnado los blasones del Temple.
Se dice que fue la maldición de la joven la que guió el fatal destino de la fortaleza y que, al coincidir la fecha del suceso cada año, un rayo de luna besa con ternura la losa de los enamorados.
Bibliografía consultada: Leandro Carré Alvarellos. Las leyendas tradicionales gallegas (Editorial Espasa Calpe, Madrid 2008)
Se dice que tras una batalla de intereses feudales, siendo la fortaleza bastión templario, un joven malherido fue apresado junto con su amada, cuyos desvelos y cuidados fueron suficientes para que éste escapara de la llamada de la muerte. El amor recíproco de ambos jóvenes los mantenía vivos en las mazmorras templarias.
Fue un joven templario el que, conmovido por el infortunio de los jóvenes, les devolvió la libertad una noche sin luna, poniendo a escondidas una pequeña embarcación que los ayudaría a marchar lejos de sus carceleros.
Los enamorados guiaron la pequeña barca rumbo a la libertad, sin embargo la luna, hasta ahora ahogada en las sombras, apareció en la noche recortando la silueta de la frágil barca contra el horizonte, haciéndolos visibles ante sus enemigos.
Los vigías alertaron de la evasión de los presos, a los que la guarnición de ballesteros respondieron con una lluvia de flechas. El joven templario conmovido intentó ayudarlos, más las flechas asesinas no hacían distinción a la hora de dar muerte.
Desaparecida toda esperanza de lucha, el joven se inclinó sobre su amada, tratando de evitar de esta manera que las flechas diesen con ella, mas no pudo evitar que diesen con él. La joven, viendo a su amor inerte cayendo al mar, tras un grito de amor y maldición se echó tras él.
Al día siguiente, el mar caprichoso abandonó los cuerpos enamorados sobre la playa, unidos por un abrazo eterno que los uniría por siempre.
El jefe templario los enterró al pié de una de las torres interiores del castillo, y decía la leyenda que, desde entonces, todas las noches de luna un rayo de luz se posaba sobre la sepultura de los jóvenes, velando su amor incondicional, y que al anunciarse el alba, brillaban con siniestro fulgor encarnado los blasones del Temple.
Se dice que fue la maldición de la joven la que guió el fatal destino de la fortaleza y que, al coincidir la fecha del suceso cada año, un rayo de luna besa con ternura la losa de los enamorados.
Bibliografía consultada: Leandro Carré Alvarellos. Las leyendas tradicionales gallegas (Editorial Espasa Calpe, Madrid 2008)
Castelo da Lúa, Rianxo
El yacimiento arqueológico medieval conocido como Castelo da Lúa está situado en el lugar de O Pazo, en la parroquia rianxeira de Taragoña. Son los vestigios de una de las fortalezas militares más grandes de Galicia, situada en la desembocadura del río Té, al lado mismo de la playa de A Torre.
Originario del siglo XIII por obra de Paio Gómez Charino, pasó por manos de la Orden del Temple y de la Mitra Compostelana, hasta su destrucción por los Irmandiños en el año 1465. Fue reedificado posteriormente por Suero Gómez de Soutomaior, bisnieto de Charino.
En 1480 el gobernador real Fernando de Acuña ordena su derrumbe, siendo las ruinas utilizadas como prisión hasta 1532, fecha en la que pasa a manos del arzobispo Alonso II de Fonseca.
Como curiosidad comentar que, tras arruinarse en el año 1600, sus restos fueron aprovechados en 1740 para la construcción del campanario de la iglesia de Santa Columba, también en Rianxo.
"La leyenda del beso", Reveriano Soutullo
La Leyenda del beso es una zarzuela en dos actos, el segundo dividido en dos cuadros, en prosa y verso. La acción se desarrolla en los aledaños de un castillo señorial castellano. Fue estrenada en el Teatro Apolo de Madrid, el 18 de enero de 1924.
¿Y que pinta esto aquí? os preguntareis, pues que esta hermosa zarzuela fue compuesta por uno de los compositores más importantes nacidos en Galicia: Reveriano Soutullo. Nació en Ponteareas en 1880 y fue autor, entre otras, de variadas composiciones: La del Soto del Parral, El último romántico, Justicia y ladrones, La leyenda del beso o Encarna, la misterio.
Una de sus más importantes obras es Ponteareas, el primer pasodoble gallego, donde incorpora alboradas y alalás.
Es interesante saber que, Amor de hombre, éxito ochentero del grupo vasco Mocedades, es una versión del intermedio de la ya comentada zarzuela La leyenda del beso, que en España llegó a vender 500.000 copias en pocos meses.
Veamos aquí una pequeña muestra del legado de nuestro paisano:
http://www.youtube.com/watch?v=nR_fVDBRvOk
http://www.youtube.com/watch?v=VC5FxFrnB8c
¿Y que pinta esto aquí? os preguntareis, pues que esta hermosa zarzuela fue compuesta por uno de los compositores más importantes nacidos en Galicia: Reveriano Soutullo. Nació en Ponteareas en 1880 y fue autor, entre otras, de variadas composiciones: La del Soto del Parral, El último romántico, Justicia y ladrones, La leyenda del beso o Encarna, la misterio.
Una de sus más importantes obras es Ponteareas, el primer pasodoble gallego, donde incorpora alboradas y alalás.
Es interesante saber que, Amor de hombre, éxito ochentero del grupo vasco Mocedades, es una versión del intermedio de la ya comentada zarzuela La leyenda del beso, que en España llegó a vender 500.000 copias en pocos meses.
Veamos aquí una pequeña muestra del legado de nuestro paisano:
http://www.youtube.com/watch?v=nR_fVDBRvOk
http://www.youtube.com/watch?v=VC5FxFrnB8c
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